Siddharta (Hermann Hesse)
09.04.2020
Todos querían así a Siddharta. A todos daba alegría y gozo. No obstante, el propio Siddharta no sentía alegría ni gozo de sí mismo. [...] Siddharta había empezado a alimentar el descontento en su interior. Comenzó por comprender que el amor de su padre, el cariño de su madre, y también el afecto de su amigo, Govinda, no le harían feliz para toda la vida. No le satisfacía ni le bastaba.